SAFO

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lunes, 30 de septiembre de 2019

EL DÍA QUE VI QUE LA LUNA SE DESINFLABA

Principios de los 90, eran épocas difíciles, había terminado hace poco la primaria y estaba a full con las vacaciones. Yo vivía en un sexto piso con un balcón que daba a la calle desde donde se veía el cielo al Oeste. Una noche estaba mirando la tele en blanco y negro y la observaba muy de cerca por que eran de esas teles Noblex rojas de 13 pulgadas. De repente algo en la ventana me distrajo, pero no vi nada fuera de lo normal, salvo en el horizonte que se veía una luz blanca perfectamente redonda. Al principio creí que era la Luna, pero al instante vi que el blanco era tan puro que era imposible que sea el satélite terrestre. Justo en ese instante de duda, la luz blanca hizo una especie de pirueta mágica y desapareció del cielo, fue como ver un globo que se pinchaba en un giro en espiral que se desvaneció. Yo me quede perplejo y en un principio creía que fue un algo similar a un globo, pero por la altura y la perfección del blanco que lo iluminaba no podía ser algo artificial que yo conozca al menos. Así que mi conclusión hasta hoy en día es que lo que vi fue un OVNI, no de por si extraterrestres, sino un objeto volador no identificado. Podría ser un fantasma, quien sabe si era nave espía de alguna potencia que estaba probando algo, quizás fue un satélite de alguna otra dimensión o del mismísimo futuro, vaya a saber si fue algo que vi solo yo por un reflejo (aunque era demasiado nítido y perfecto) o podría ser una nave espacial. Lo seguro es que es algo que no se ve todos los días, de hecho nunca mas volví a ver algo similar en mi vida.

sábado, 28 de septiembre de 2019

EL REY DEL KARMA


Esto comienza como una simple anécdota que sirve para que se entienda como funcionarían muchos de los sucesos que me pasaron en mi vida. La anécdota es simple, pero es un ejemplo para otras situaciones que pasaron de una forma similar a lo que me paso esa vez: o sea, y visto el titulo del blog: termina para el culo, pero esta bien que termine así.

Eran mediados de los años 90, en esa época había videoclub para películas y también para los cartuchos de los videojuegos que eran caros, mas para pibes de 13 o 14 años. Un día, en uno de estos lugares llamado Chavez, yo estaba devolviendo un juego de Sega o alguno de Super Nintendo, no recuerdo ese juego en cuestión y de repente entró un compañero de primaria a devolver un juego que el ya había jugado. Yo en esos tiempos, sino tenia que jugar, quemaba las tardes mirando como otros jugaban en una tele para probar juegos que estaba siempre arriba del aparador del negocio y sino me quedaba charlando de boludeces. Así que era una de esas tardes cuando este compañero, Jorge, sacaba su juego para devolverlo. En ese momento lo mire y mire el juego y en un rapto de estupidez humana de mi parte le dije: "Uh, que juego de mierda que te alquilaste". Jorge me miro como el culo (debería haberme trompeado) pago y se fue. Yo me hice el tonto y seguí en la mía. Como ya habia terminado la primaria, creo que nunca mas hable con Jorge.
La cuestión es que el juego que se había alquilado era el "Street of rage 2" un juegazo increíble que jugué unos años después en un emulador en la PC. Lo maravilloso es que cuando lo jugaba me recordaba a mi mismo la estupidez que le dije a Jorge. No solo me enganche con el juego sino que me lo llegue a terminar en una o dos sentadas de horas y hasta la música no la podía dejar de tararear. Lo mas paradójico es que para mucha gente ese era uno de los mejores juegos que habían jugado en esas épocas. Justo después de acabarme el juego me dieron ganas de viajar en el tiempo al pasado para decirme que me calle antes de decir boludeces y de paso darme a mi mismo un para de consejos que me serian útiles en el futuro. Aunque como era tan idiota seguro que no me hubiese hecho caso. La cosa es que en una cuestión tan simple como lo es un videojuego, la vida me enseño que debo dejar de opinar antes de saber (cosa que le vendría muy bien a mucha gente en la actualidad) y que ademas de ser un bocon al pedo, el tiempo me demostró que no solo me equivocaba sino que era exactamente todo lo contrario. Incluso si el juego hubiese sido malo estuvo mal haber hablado de mas. Así que si por esas putisimas casualidades de la vida, o el karma, Jorge esta leyendo esto, le pido disculpas y que gran saga que es Street of rage, ya estoy esperando el cuarto que sale en estos días.




Y con este mismo modus operandi me han sucedido varias situaciones en el futuro: rechazar mujeres que luego me rechazaron a mi, alegrarme por una desgracia que luego la sufro yo, etc. Así que habría que ver si a las personas que me han hecho daño les pasó lo mismo, ver si les llegó el tan doloroso karma que lo único bueno que tiene es que te enseña que fuiste un pelotudo, al menos al que este dispuesto a aprender y no siempre echarle la culpa a un tercero.